lunes, 10 de febrero de 2014

JULIO CESAR
Una de las escenas de la representación
En el teatro Bellas Artes de Madrid se puede disfrutar de este Julio Cesar de William Shakespeare versionado y dirigido por Paco Azorín. En esta versión han optado por eliminar los personajes femeninos (el propio Cesar nos cuenta los sueños de Calpurnia, su mujer, que le advierte que no asista ese día al Senado), y se ha estructurado como una larga noche llena de conspiraciones y de violencia. 
La puesta en escena es totalmente minimalista, un obelisco en una parte y unas sillas en la otra, con las que se va jugando a lo largo de la representación, pero de forma lo suficientemente discreta como para que no distraiga en ningún momento del texto. La iluminación sume la acción siempre en una especie de penumbra, de noche eterna, y el vestuario, muy castrense, remarca la llegada al poder desde la violencia, (la guerra, un asesinato, un golpe de estado...), de fondo hay una gran pantalla que personalmente creo que es totalmente prescindible por que no aporta nada, es mas en algunos momentos incluso distrae. 
Sergio Peris-Mencheta (Marco Antonio) y Mario Gas (Cesar)
El texto tiene una fuerza y una actualidad fuera de toda duda, con dos discursos muy distintos, por un lado el de Marco Antonio (Sergio Peris-Mencheta) nacido de la emoción, del amor incondicional a Cesar, que apela al amor que Cesar sentía por su pueblo, el otro el de Bruto (Tristán Ulloa) nacido del amor a Roma, aun a pesar de su amor a Cesar, que apela fundamentalmente a la justicia y a la libertad, dos discursos opuestos pero en definitiva iguales en el fondo, dos grandes discursos que en realidad solo buscan  manipular al pueblo para que este de su lado. 
Agus Ruiz (Casca) y Tristán Ulloa (Bruto)
José Luis Alcobendas (Casio)
En cuanto al elenco, encabezado por Mario Gas (Julio Cesar) que transmite todo el poder de un gran líder, que disfruta siendo adulado y que por mantener esa imagen no se deja llevar por los temores que le asaltan ni por los malos presagios que asustan tanto a su mujer, esta fantástico. Le acompañan Tristán Ulloa (Bruto) genial en esa lucha interna que mantiene entre el amor a Cesar y su deber para con Roma, en su intento de ser honrado y justo, en su lucha por buscar el bien común; Sergio Peris-Mencheta (admirables sus trabajos como director de escena : "un trozo invisible de este mundo" o "tempestad") y que aquí hace un trabajo impresionante especialmente en el monologo que dirige al pueblo en el funeral de Cesar, se va creciendo por momentos. Y para terminar también me han gustado mucho Agus Ruiz que da vida a Casca, y por supuesto José Luis Alcobendas (Casio), impecable siempre, que hace grande cualquier papel ("la paz perpetua", "Dracula", "medida por medida" y tantas otras). 
Una obra muy interesante para reflexionar sobre el poder, quien lo ostenta y como.