martes, 3 de noviembre de 2015

LOS NADADORES NOCTURNOS
Los nadadores nocturnos que nacieron en Fringe14 se zambullen de nuevo en la piscina esta vez en el teatro La Abadía entre los días 4 y 8 de noviembre. 
José Manuel Mora, autor de los nadadores nocturnos, obra en la que refleja dos de los temas que le obsesionan y le atraviesan, uno intimo y personal: la paternidad y otro publico y de índole política como es el terrorismo o la legitimación de la violencia para lograr el verdadero cambio social. La pieza retrata un mundo enfermo y fragmentado con "corazones rotos que viven en un contexto económico que no deja margen para la inocencia ni para el amor". 
El resultado es un texto, que con un lenguaje sencillo nos acerca a un mundo muy particular, profundamente pesimista salpicado de un humor surrealista, donde unas personas heridas, después de recibir muchos golpes, sienten que han perdido su lugar en el mundo. En su huida, vagando sin rumbo acaban reuniéndose en una piscina, por la noche, para nadar, sin apenas hablar pero sintiéndose arropados los unos por los otros. La orden de los nadadores nocturnos acoge solo a seres dañados, tocados y lastimados por el amor que se aferran a este último refugio para intentar dar sentido a sus vidas. Su líder espiritual, un hombre de avanzada edad que fue acusado de abuso sexual cuando era profesor, Markos Marín (al menos en Frige14 donde se estreno, aunque creo que después lo ha encarnado Joaquín Hinojosa que me encantó en fortune cookie) cree que en la violencia radical se encuentra la solución para la situación de desazón y desamparo en la que viven los miembros de esta peculiar secta. Entre los nadadores una chica invisible, que usa una peluca rubio platino para llamar la atención, un niño paloma, un joven acomplejado por habitar un cuerpo equivocado, una chica de buena familia que desea ser madre, hijos sin padres y padres sin hijos. Su lema "cuando oscurece siempre se necesita a alguien", que refleja fielmente su necesidad de afecto. 
El espléndido montaje que realiza Carlota Ferrer es una performance donde se mezcla danza (las coreografías son bellísimas), teatro, música e imágenes de vídeo (donde se puede disfrutar de primeros planos de los interpretes) en perfecta armonía con una iluminación muy tenue y en tonos rojos que ayuda a crear un ambiente intimo y sensual, donde todo fluye de forma armoniosa. 
El elenco lo completan Óscar de la Fuente, Miranda Gas, Esther Ortega, Alberto Velasco, Paloma Diaz, Jorge Machín con la colaboración especial de Enrico Barbaro. Magistrales todos los actores, una autentica delicia dejarse seducir por sus historias y nadar con ellos a lo mas profundo, desconocido y oscuro de cada uno. 
Un espectáculo inolvidable, estos nadadores nocturnos te tocan el alma, y provocan una marea de emociones con cada brazada.